Ninguna madre le gusta que su niño comience a llorar, pero todo es diferente en el "Naki Sumo", un concurso donde compiten los pequeños para ver quien llora más fuerte.
El festival "Naki Sumo" se celebra todos los años, en el Templo Senso, en Tokio, y lo ha hecho durante los últimos 400 años. Luchadores de sumo mantienen a los bebés en el aire, y tratan de asustarlos para que empiecen a llorar mientras son observados por los jueces. El niño que de más gritos y lo haga con mayor fuerza es considerado el ganador.
Los padres japoneses traen a los bebés al concurso por voluntad propia, ellos piensan que mantener llorando a sus hijos les atraerá buena salud, y ahuyentará los malos espíritus. Este año, 80 bebés, todos menores de un año de edad, participaron en Naki Sumo. Como ya habrán adivinado, el más malcriado a ganado.
1 comentarios:
joder, en oriente están dementes!
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